Desde El Búnker
Alberto Osorio
Lunes 11 de agosto de 2025.- El alcalde de Tlajomulco supo colarse a pesar de no haber estado en el presídium, durante la inauguración de la primera fase del Hospital Regional de Especialidades del ISSSTE, en ese municipio, en el acto encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum.
El edil aprovechó al máximo la visita de la mandataria federal y realizó una jugada maestra para ser escuchado y visto.
Las imágenes que corren en redes sociales, hablan por sí solas y reflejan ese momento, cuando se observa a un Pablo Lemus incomodo en el breve instante de diálogo entre Quirino y la presidenta.
Acostumbrado a estar siempre al frente de las notas felices y de usar todo el aparato propagandístico en su favor, a Pablo no le causó ninguna gracia que Quirino lo saltará en la búsqueda de la interlocución con la presidenta.
Junto a Quirino también se vio -atrás de la vaya- a la alcaldesa de Guadalajara, Vero Delgadillo, ambos emanados de Movimiento Ciudadano, ambos ubicados en la empoderada corriente alfarista -dentro del gobierno de Lemus- y los dos (en mayor o menor medida), metidos en una relación incomoda, que en ocasiones es cordial y en momentos, es ríspida con el gobernador Pablo Lemus.
En ese mismo evento y por encima de los anuncios oficiales, la principal nota en el escenario de la política, es que a Pablo lo abuchearon en el búnker de MC (Tlajomulco).
Los que defienden a Lemus desde perfiles falsos o restringidos de redes sociales o en la llamada prensa corporativa, la que trabaja bajo contrato con la administración de Pablo, de inmediato salieron a decir que los gritones que abuchearon al mandatario fueron los acarreados de Morena.
Los “aplaudidores” se muestran incapaces de reconocer que hay ciudadanos, entre ellos morenistas o emecistas de todos los niveles que muestran una actitud crítica y hasta de repudió a la forma “felizóloga” de gobernar de Lemus y de negar la crisis que enfrenta Jalisco en materia de seguridad y en distintos aspectos del desarrollo social.
Los “comentócratas” al servicio de Pablo, prefieren reservarse un dato y es el hecho que uno de los más aplaudidos, el viernes, además de la presidenta Claudia, fue el alcalde Quirino, cuando lo mencionaron en el referido acto, en Tlajomulco.
Es más, algunos de ellos se atreven a decir que las muestras de repudio contra Lemus, pudo ser fuego amigo desde la corriente de los “quirinitos”, pero con una carencia escandalosa de elementos de fondo, en ese análisis.