Desde El Búnker
Alberto Osorio
Viernes 01 de agosto de 2025.- Dramática situación se vive en dos de los cuerpos de seguridad en la Zona Metropolitana. En menos de dos semanas, según reconoce la Fiscalía del Estado, hay ocho uniformados sujetos a investigación por su presunta relación con diferentes homicidios.
En Tlajomulco, son cuatro policías municipales fueron ya vinculados a proceso por el deceso de una persona que los policías llevaban detenido y quien posteriormente, se reportó estaba muerto en la caja de una de las patrullas de la Comisaría de ese municipio.
El hecho ocurrió tras un violento desalojo de un predio, supuestamente invadido por un grupo de “paracaidistas”, quienes fueron sacados con el uso de la fuerza pública de los terrenos que ocupaban en cruce de las calles San Serafín y Silvano Rico, en San Sebastián el Grande, el martes 22 de julio.
En ese lugar según denuncia de los afectados, a través de redes sociales, al momento del desalojo se utilizó la violencia para sacarlos del lugar o impedirles el ingreso para rescatar sus pertenencias, e incluso reportan que en el desalojo se utilizó maquinaria pesada para destruir las viviendas, en tanto que un individuo vació gasolina a las casas hechas de materiales de reciclado y les prendió fuego.
En medio de todo ello se desató una trifulca y varios de los afectados confrontaron a los gendarmes y resultaron golpeados por parte de los policías. El fallecido ya estaba detenido y a bordo de una de las patrullas y fue ahí en donde se aseguró su cuerpo.
En Zapopan, el 9 de julio, cuatro integrantes de una familia fue asesinada por un grupo de seis personas, cuatro de ellos policías. Tres de los elementos se mantienen prófugos y uno está detenido, según lo reconoció el fiscal, Salvador González de los Santos.
Junto a esas agresiones, desde hace varios meses habitantes de la zona de Molinos y otras colonias ubicadas por el rumbo de la carretera a Colotlán, denuncian una serie de extorsiones a las que son sometidos los automovilistas, luego de ser retenidos bajo el pretexto de una revisión de rutina.
Denuncias anónimas señalan que los policías municipales en Zapopan cobran extorsiones de 5 mil, 10 mil pesos o más, ante cualquier tipo de pretexto y argumentan que se ensañan con vehículos que portan placas de otros estados.
¿La Policía de Zapopan y el alcalde, Juan José Frangie tendrán conocimiento o investigarán estos hechos?
