Desde El Búnker
Alberto Osorio
Jueves 28 de agosto de 2025.- El PRI se convierte en la cuarta fuerza en el Senado, por debajo del Partido Verde. El 27 de agosto seguro será recordado como el miércoles del “asalto” a la tribuna en el Senado tras la trifulca encabezada por el senador Alejandro “Alito” Moreno y los golpes que el líder del PRI, soltó contra el presidente de la Mesa directiva, Gerardo Fernández Noroña, en lo que pretendía ser el último día de sesión de la permanente.
El saldo fue de un colaborador de Noroña de nombre Emiliano González derribado al suelo de un fuerte empujón ejecutado por el propio “Alito” Moreno y luego golpeado en el suelo por el mismo Alito y por otros legisladores del PRI.
Contra Noroña hubo varios golpes, intentos de derribarlo y forcejos que quedaron registrados en el video, no obstante, la narrativa del propio Alejandro Moreno, la agresión fue de Noroña hacia su persona, según explicó en la rueda de prensa posterior al zafarrancho, la que coronó con una frase que será recordada en el archivo de los debates del senado: “Que venga aquí (Noroña) para pegarle dos chingadazos”.
En contraparte, Noroña también ofreció su rueda de prensa para anunciar la presentación de una denuncia penal contra Alejandro Moreno por las agresiones hacía él y contra Emiliano González (su colaborador).
“Alito” argumentó que fue el senador Noroña quien faltó al acuerdo de ofrecer tiempo para que cada fracción parlamentaria fijara su posición con relación a varios temas pendientes de discusión.
Desde antes de la escena de violencia, las cámaras de video observaron a “Alito” intercambiado opiniones con la explosiva panista, Lilly Téllez en un instante en que parecía que daba instrucciones o hacían recuente de la ubicación de cada uno de los senadores.
Antes de desatarse el momento de la agresión y en el momento en que se cantaba el himno nacional, las cámaras captan el instante en que “Alito” sin ninguna autorización, sube a la tribuna acompañado de Rubén Moreira, Carlos Eduardo Gutiérrez Mancilla y Erubiel Alonso y rodean a Noroña, en una situación que pone incomodo al legislador del PT, pero no logra comprender de qué se trata hasta muy tarde, cuando descubre que no iban a tratar de dialogar o dar un posicionamiento, sino en el afán de atacar.
Las agresiones de “Alito” y al menos la de uno de sus compañeros contra Noroña y contra Emiliano González reflejaba una actitud desesperada del líder de los priistas, ante los últimos acontecimientos en el Senado, ya que en la sesión se desarrollaba el mismo día, el senador, Néstor Camarillo, dirigente del tricolor en Puebla, anunciaba su salida de esa bancada, se proclamaba senador independiente y su integración a MC.
Con esa decisión el tricolor se convertía por primera vez en 96 años, en la cuarta fuerza electoral dentro del Senado, por debajo del Partido Verde. Paradójico, que el PRI quedará por debajo del mismo instituto político que el esquema priista había generado como un partido satélite para mantener mayorías o controlar el poder hace algunos años.
Muy a su estilo, Noroña no se cansaba de citar ese hecho entre los reporteros o periodistas que le preguntaban al respecto, y sin lugar a dudas que la mofa era tal, que el enojo de “Alito” subió de tonó hasta llegar a la intención de “partirle la madre” a Noroña.
El segundo raund del miércoles negro para el petista, Fernández Noroña, y sus aliados, ocurrió ante los medios de comunicación en donde proliferaron versiones de que la agresión había sido provocada por el propio Gerardo. El primero en abrir fuego contra Noroña, fue el conductor de Radio Fórmula, Pepe Cárdenas, uno de los odiadores profesionales de la 4T, quien sin preámbulo le pregunta a Fernández Noroña, “¿Cómo te quedo el cachete”?
Luego cuestionó el pleito desatado en el Senado, dando por sentado que él (Noroña) había iniciado o participado en el encontronazo, situación que desató toda la ira de Fernández Noroña, quien terminó por cuestionar el nivel de periodismo que ejercen los grandes medios.
Aristegui publicó en redes: “Noroña lanzó el primer empujón”.
El Financiero también “disparó” en ese mimo sentido: Noroña y Alito llegaron a los golpes, dejando a varios legisladores y colaboradores atrapados en la trifulca. Ese medio dio a conocer la fuerza con que “Alito” aventó al suelo a Emiliano González y la forma como lo patearon en el suelo, además de la frase célebre del senador Moreira en el momento de la agresión “No te muevas perro”.
Cosa rara en medio de las muestras de parcialidad en favor del líder del PRI, el Grupo Reforma se mostró más objetivo: “¡Agresión! Alito Moreno contra Noroña”.
Al final Noroña y Alito, cada uno por su lado dijeron temer por su vida. Agentes agentes del ministerio público acudieron al senado para dar fe de la denuncia de Noroña y de la agresión registrada, esto como un elemento previó para el análisis de la solicitud de desafuero de “Alito”.
Todo el zafarrancho levantado por Alito Moreno, se trata de una escena de golpes donde le PRI exhibe toda su debilidad y coraje, al sumirse en calidad de cuarta fuerza política en el Senado.
